Trajes nupciales de fantasía
Lo que más le gusta elaborar a María son vestidos y trajes de boda, pero no los convencionales. «Me encanta confeccionar para bodas temáticas, por ejemplo medievales, o de fantasía, como un traje de Assassin’s Creed», cuenta. Además, le complace dedicarse a este ámbito porque acuden a ella muchas chicas que no encuentran sus tallas en tiendas convencionales. «Conmigo las opciones son más amplias ya que los realizo a medida». Pero desde que empezó la pandemia, ya no puede explotar este campo. Aunque cuando se cierra una puerta, se abre una ventana. En el confinamiento, con todos los comercios cerrados, muchísimas mujeres que acababan de ser madres recurrieron a ella. «A todas nos gusta ver a nuestros hijos bien preparados cuando llegan al mundo, así que no me llegaban las manos para tejer en aquellos meses», cuenta.
María ahora se dedica mayoritariamente a confeccionar ropa de bebé ALBERTO LÓPEZ
La gran mayoría de lo que ahora confecciona María es para bebés, el otro tipo de ropa que más le apasiona hacer. A pesar de que hace apenas tres meses que aterrizó en Lugo con su hija y sus nietos, esta modista ya está recibiendo numerosos pedidos y resolviendo los que tenía pendientes de Canarias. Los clientes son tanto de Cospeito como de Lugo. «Aunque por esta zona no haya muchos niños pequeños, tengo a muchas abuelas haciéndome pedidos para sus nietos». Por la época del año, lo que más confecciona últimamente son gorros, jerséis o «ranitas». Este último es todo un éxito, se trata de un pequeño peto que personaliza para cada niño. María nota un incremento del interés por lo artesanal: «la ropa de máquina de la mejor marca nunca tendrá comparación con lo tejido a mano». Por Facebook, Instagram y, sobre todo, por el boca a boca, esta modista internacional ya se ha hecho un hueco en un entorno del que se enamoró.