Este 8 de agosto, la Luna nueva se produce en Leo, un signo enérgico, creativo, brillante y vinculado al poder.
Como sucede todos los meses, la Luna nueva se produce en el exacto momento de la conjunción, cuando el Sol y la Luna se encuentran en el mismos grados, minuto y segundo zodiacal. Ahí, la Luna no es visible en el cielo.
Así, comienza un ciclo creciente -la "quincena clara"-, un tiempo ideal para para comenzar todo tipo de actividad que necesitemos estimular, hacer crecer y fomentar.
"Leo está gobernado por el astro rey de nuestro sistema solar, por eso simboliza la jerarquía, el poder, la nobleza, lo elevado, brillante, destacado y, como la estación que le corresponde, el verano, es generoso y creativo", explica la astróloga Patricia Kesselman.
Y suma: "La Luna en Leo favorece la diversión, las actividades relacionadas con el arte, la moda, los objetos de lujo y de valor".
Por eso, estas próximas tres noches son perfectas para pedir éxito en todo lo que encaremos, seguridad personal, capacidad de tomar decisiones acertadas y valor para empoderarnos frente a quienes necesitemos hacerlo. En el amor, nos puede ayudar a conocer a alguien con quien construir una relación sana.
Aquí, hechizos y rituales para aprovechar al máximo toda la fuerte y poderosa influencia de esta enérgica Luna nueva en Leo.
Como siempre, es mejor realizar los rituales de noche y en un ambiente relajado y tranquilo.
Primero, sobre una vela de color dorado (o amarillo) escribiremos de abajo hacia arriba, algo sobre el proyecto o iniciativa que buscamos concretar. Por ejemplo: "ampliar mi negocio", "conseguir el empleo que me interesa", "fortalecer mi autoestima" o "vincularme con personas que me puedan ayudar".
Luego, disponemos un altar en el que colocamos la vela, una cuchara de mirra o incienso, algún objeto de color naranja que tengamos (o puede ser una cinta de ese color) y una copa de agua con sal.
Prendemos la vela, nos visualizamos rodeados de color dorado y en nuestra mente nos vemos en imágenes felices y logrando lo que pedimos. Después de unos minutos, cuando terminamos la visualización, decimos "gracias, gracias, gracias".
Una vez que la vela se consume, enterramos la mirra o el incienso que utilizamos en una maceta o lugar con tierra y allí mismo, con la mano izquierda, volcamos el agua. El objeto naranja lo guardamos en su lugar. Si utilizamos la cinta, la podemos atar en la muñeca o ponerla en la billetera que solemos utilizar.
Esta es una ceremonia para fortalecer una pareja o encontrar a alguien que realmente sea para nosotros, que aporte algo positivo en nuestra vida y nos acompañe a brillar. No es un ritual para insistir caprichosamente en aquellos vínculos que ya comprobamos que no nos hacen crecer.
Sobre una vela rosa (o roja) escribimos de abajo hacia arriba el nombre de la persona con la que nos interesa reforzar la relación. En el caso de quienes están solos, deben escribir "deseo conocer un buen amor". Luego, colocamos unas gotas de nuestro perfume favorito sobre la vela.
Armamos un altar con la vela, una copa de agua con miel (o canela), una cinta rosa y, en el caso de pedir por un vínculo armado, una foto u objeto de la persona que nos interesa.
Prendemos la vela, nos visualizamos rodeados de color rosa brillante y repetimos tres veces: "Luna, a través de tu influencia mágica, te pido que me otorgues el poder necesario para mejorar mi relación con (nombre) o encontrar un amor que me acompañe en dicha y felicidad. Gracias, gracias, gracias".
Cuando la vela se apaga, tiramos el agua con la mano izquierda en un lugar con tierra y guardamos el trozo de cinta rosa en un cajón o lugar personal.
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