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Paula Badosa y Juan Betancourt piensan en su boda desde una luna de miel en las Maldivas Paula Badosa y Juan Betancourt piensan en su boda desde una luna de miel en las Maldivas
Quizá había quien esperaba que tardasen un poco más en sonar las campanas de boda, pero cuando el amor está tan claro y tan palpable como en el caso de Paula Badosa y Juan Betancourt tampoco hacen faltan meses y meses de consolidar una relación para darse cuenta de que es la persona adecuada. Y ellos, por lo que parece, están por la labor de darse el "sí, quiero".
Al menos, si atendemos a sus publicaciones en Instagram. La tenista, reciente ganadora de Indian Wells y semifinalista de las WTA Finals, y el modelo apenas llevan saliendo medio año, pues confirmaron su noviazgo el pasado verano con unas fotografías juntos en Nueva York, pero ello no ha quitado que en las vacaciones de las que ahora mismo disfrutan no haya surgido una conversación crucial.
La pareja está disfrutando de unas bucólicas vistas al poder despertarse cada día en las Islas Maldivas, un destino muy en boga entre las clases altas dado que no exige ningún requisito previo por la pandemia para entrar. Allí, Badosa y Betancourt están disfrutando de las increíbles playas que ofrece el océano Índico y que parecen ideales para una luna de miel... Aunque ahora ellos deben descubrir otro paradisíaco lugar.
"Y ahora dónde voy yo de luna de miel...", se ha preguntado el modelo de 31 años en una de sus últimas publicaciones en Instagram. Y su novia no ha dudado en responderle, dando a entender que puede que se traigan alguna sorpresa entre manos: "Algún sitio pensaremos". Por otro lado, las muestras de cariño son constantes y si Paula titulaba su post con un "Imposible pedir un lugar mejor para estar ahora" en inglés, Juan le contestaba un sexy "¿Dónde va ese culito, descaraíta?".
Y lo cierto es que él sabe perfectamente dónde va porque no se han separado ni un instante desde que comenzasen a salir, pues aunque la profesión de Badosa hace que tenga que estar viajando continuamente por el mundo, ello no ha supuesto impedimento alguno a su relación: Betancourt ha unido su amor al circuito profesional de tenis y ha estado con ella desde Alicante a California o Guadalajara, México.
